Perdóname por juzgarte. Quizás nunca te di una
verdadera oportunidad de demostrarcomo
eras realmente. Yo por otro lado siempre fuimuy reservado hacia ti y hacia los demás nunca dejando que vieran el
sufrimiento en mi interior. Siempre entreteniéndolos con una máscara de
felicidad muy bien aparentada. Tratando de mantenerlos siempre lejos así
protegiendo yo mi frágil corazón herido ya por mi inestabilidad. Te califique
como inocente, tierna y hasta un poco recluida. Perdón si alguna vez te
lastime. Sabes que nunca fue mi intención. Solo contigo pude ser yo mismo
mientras trataba de aparentar ser otra persona. Gracias a ti pude a prender a
controlarme y quizás gracias a ti que evitaste que yo enloqueciera. Siempre has
mostrado que eres alguien de confianza. Nunca trate de engañarte. Es solo que
no quería que vieras mis sufrimientos. Quizás por eso te sorprendiste cuando te
deje saber por lo que yo estaba pasando. Pase tanto tiempo actuando como si
estuviera verdaderamente feliz que termine creyéndolo y el actuar se convirtió
en algo de segunda naturaleza. En si yo estaba viviendo una gran mentira.
Aunque vivir esa mentira pudo haber evitado una mayor depresión que la que ya tenía.
Solo durante estos últimos meses es que yo he "cambiado". Te di la
oportunidad de mostrar quien verdaderamente eras y confié en ti. Me atreví a
exponer mis heridas. Sacarlas afuera a ver si así lograba sanar después de
tantos años. Te permití ver las cicatrices que marcan mi alma. En un par de
meses pasaste de ser una conocida a ser alguien en que confiaría no importa la situación.
Me arrepiento de no haber intentado antes pues ahora eres de mis más cercanas
amistades. Un círculo que año tras años se vuelve más apretado. Tú has visto
todas mis debilidades y todos mis defectos pero aun así sigues aquí conmigo. En
cambio yo no he encontrado defecto alguno en ti. Solo haya versatilidad, y una
inmensa belleza. Tú me dices lo que piensas de una forma que no me insultas
mientras me motivas a cambiar. No quiero perderte pero la vida ya nos está
separando. Donde quiera que sea que la vida te dirija quiero que sepas que
estoy aquí contigo y que estoy feliz por ti. Siempre estuviste ahí cuando te
necesite. Quisiera agradecerte por estar ahí cuando me sentía solo. Gracias por
ayudarme cuando pasaba por depresión, por demostrarme que hay gente que me
quiere aun cuando mi mundo es destruido. Durante estos últimos meses tú me has
dado de tu tiempo y yo te he dado el mío. Tú has sido mi terapia. Yo solo quería
alguien con quien hablar tu me diste alguien que me escuchara. Para los demás
soy alguien seco pero tú viste mi lado sentimental y viste también la razón por
la cual lo mantengo resguardado del resto de la población. Tú has sido mi novocaína.
Que aunque no eliminas por completo mi dolor lo alivias y lo haces mas fácil de
aguantar. Tú aliviaste el dolor que agobiaba mis días y ni siquiera lo habías
intentado. Tu me hiciste sentir amado. Tú me hiciste saber que pertenecía. Tú
me hiciste parte del mundo luego que todos me habían rechazado. Solo tú sabes
que he estado a punto de darme por vencido tantas veces que ya he dejado de
intentar. Solo tú me ayudaste a seguir adelante aunque yo nunca pensé que valdría
la pena. Tú eres mi motivación. Pero no se a que es lo que me estas motivando
ni el por qué. Tú me ayudas por voluntad propia pues nunca te pedí ayuda y aun así
me brindaste tus manos. Tus suaves y delicadas manos fueron las que me
rescataron de una vida llena de dolor y sufrimiento. Me ayudaste a ponerme en pie
todas las veces que caí.Tu si me
apreciaste por quien era verdaderamente. Nunca trataste de cambiarme pero lo
hiciste. Tu has guardado mis secretos todos y cada uno de ellos. Siempre te
dije lo que sentía en el fondo de mi corazón y no quiero romper el patrón
ahora. Mucho menos después de todo lo que conoces ya de mí. Tengo miedo. Tengo
miedo de perderte ahora que la vida nos lanza a lugares distintos. El miedo que
ciento es algo supe natural. Cada vez que pienso en eso no logro conciliar el
sueño. El dolor se vuelve insoportable en las noches que me siento a pensar
sobre el futuro de nosotros. Temo no volver a verte. Temo algún día necesitarte
y no tenerte cerca a mi alcance. Tengo miedo de echar a perder todo lo que
hemos logrado en estos pasados meses. No quiero echar a perder esta amistad que
me ha dado razones para seguir adelante. Sé que tú no me dejarías solo y
abandonado en algún rincón del planeta. Lo que temo es que la vida nos aleje tanto
que ya no haya manera alguna de escuchar tu tierna voz llamando mi nombre. No
quiero ser yo el culpable de que tus ojos derramen miles de lágrimas a causa de
la distancia que separe nuestros corazones. Tengo miedo de que mi dolor vuelva
a resurgir y yo no lo soporte. No aguantaría yo que algún engreído hombre se
atreviera a romperte el corazón mientras estoy demasiado lejos como para hacer
que sufra tano y más de lo que el causo en ti. Quiero estar ahí cuando me
necesites como tú lo estuviste para mí en los días de mi dolor y sufrimiento.
Quisiera ayudarte a cumplir todos tus sueños y deseoso por lo menos estar ahí el día en que se
cumplan. Quiero ver tus ojos llenos de felicidad. Quiero ver el regocijo en tu
rostro. Cuanto daría yo por compartir con tigo los días más felices de tu vida
por estar ahí a tu lado. Siempre te he sido honesto en todos los aspectos de mi
vida. Siempre te das cuenta de lo que esté pasando en esos momentos por mi corazón.
Te amo. Es por eso que tengo miedo de perderte. Es por eso que temo el día en
que la vida nos separe para que cada quien siga un camino distinto al que
llevamos ahora. Tengo miedo de no volverte a ver y que yo nunca haya tenido el
valor de decirte lo que siento por ti. Por eso te lo digo ahora aunque un poco tarde
pues falta poco para que todo cambie. No quiero perderte porque tú me ayudas a
ser mejor persona. Tú me completas. Admito que nunca creí eso de la "media
naranja" de uno pero fue mucho antes de encontrarte a ti. Tú haces que los
demás vean la buena persona que hay dentro de mí. Tú me mantienes fuera de la depresión
que antes era característica en mi vida. Tú alivias mi gran dolor. Tú me haces
verdaderamente feliz. Tu me das
esperanza y temo perderte algún dia.